Los dos perros supervivientes de Gene Hackman y su esposa Betsy Arakawa, intentaron ayudar en la investigación policial sobre sus muertes, confirmaron las autoridades.
Mientras los miembros locales del departamento del sheriff de Santa Fe buscaban en la casa de la pareja durante una revisión de sus habitantes, notaron que un perro corría hacia ellos. Según el jefe Brian Moya, el canino seguía ladrando y corrió en una dirección diferente.
“Se dieron cuenta de que el perro estaba tratando de decir, ‘¡Ey, ven aquí! ¡Ven aquí!’” recordó Moya a USA Today en una entrevista publicada el martes 11 de marzo.
El perro (Hackman y Arakawa tenían tres, uno de los cuales murió junto a la pareja), llevó a los socorristas a la esquina de un guardamuebles donde el cuerpo de Hackman fue encontrado inconsciente en el suelo. Según Moya, el actor ganador del Oscar tenía las manos ennegrecidas y mostraba otros signos de descomposición. Una puerta estaba entreabierta cerca, lo que aparentemente permitía a los perros el acceso entre la casa y el patio trasero.
Las noticias llegaron a finales del mes pasado de que Hackman y Arakawa habían sido encontrados muertos dentro de su casa en Santa Fe, Nuevo México. Tenían 95 y 65 años, respectivamente.
“Es con gran tristeza que anunciamos el fallecimiento de nuestro padre, Gene Hackman y su esposa, Betsy. Fue amado y admirado por millones en todo el mundo por su brillante carrera interpretativa, pero para nosotros, siempre fue simplemente papá y abuelo”, dijeron las hijas y la nieta de Hackman a Us Weekly en un comunicado. “Lo extrañaremos profundamente y estamos devastados por la pérdida”.

Gene Hackman y su esposa Betsy Arakawa con sus perros. Courtesy of Animal Rescue Inc./Facebook
A Hackman y Arakawa le sobreviven sus hijos, Christopher, Elizabeth y Leslie, a quienes el actor compartía con su exesposa fallecida Faye Maltese, y su nieta Anna.
Un médico forense confirmó luego que Hackman murió debido a una enfermedad cardiovascular aterosclerótica hipertensiva con la enfermedad de Alzheimer como un factor contribuyente significativo. Arakawa, por su parte, murió a causa del síndrome pulmonar por hantavirus.
Después de que se descubrieron los cuerpos de Hackman y Arakawa, los perros supervivientes Bear y Nikita, fueron llevados a un refugio local para mascotas (su perro, Zinna, también murió el mes pasado mientras estaba encerrado en una jaula dentro de la casa de la pareja).
“Ella estaba dedicada a esos perros”, recordó el propietario del Gruda Veterinary Hospital Robert Gruda a USA Today. “Ella era consistente, predecible. Sabíamos que algo estaba mal cuando no recogió la comida a tiempo”.
Arakawa había llevado a Zinna, Bear y Nikita al Gruda Veterinary Hospital durante años.
“Era una excelente dueña de perros, una excelente cuidadora para esos perros”, recordó Gruda. “Realmente los mimaba”.
Según Gruda, su personal vio por última vez a Arakawa a finales de enero cuando recogió a Zinna después de una operación “importante”.
“Ella era amigable, responsable,” recordó Gruda. “Así es como nos ganamos la vida, con dueños [que] cuidan de sus animales y nos ven de forma consistente”.
